El día de su boda con una joven posadera de Lonjumeau, el postillón Chapelou es descubierto por el director de la Ópera, que lo contrata como solista y lo lleva a París. Pero Madeleine quiere recuperar a su marido. ¿Es esta una historia sobre el ascenso social bajo el Antiguo Régimen? ¿O un alegre homenaje del siglo XIX industrial al XVIII galante? ¿O la aventura de un seductor atrapado en su propio juego? Es todo eso y mucho más. Es el triunfo del canto: Chapelou y su aria con su decisivo re agudo, Madeleine con sus impresionantes metamorfosis vocales. La mítica obra de Adolphe Adam vuelve a la Ópera Cómica, donde se estrenó en 1836. Esta obra ha entusiasmado a los amantes de la ópera de toda Europa, pero no se ha representado en este escenario desde 1894. El impulso de Sébastien Rouland despliega la partitura escrita por el maestro del ballet romántico, el talento y el humor de Michael Spyres hacen un retrato ideal del engreído y atractivo héroe, y la sutileza de Michel Fau hace justicia a todas las facetas de esta deslumbrante comedia.

Con la colaboración de Naxos